En 1910, D. Francisco Pérez Abad (1890-1946), trabajando en la construcción, comenzó la historia de una dedicación que no cejaría hasta hoy, pasando a sus hijos, nietos y biznietos.

En relación con la línea actual; José, Francisco y Antonio prosiguieron en una muy fecunda dedicación. Trabajando por todo Aragón en obras publicas, edificación y restauración, carreteras, hoteles, viviendas, guarderías, residencias, colegios en Jaca, Huesca, Daroca, Ejea de los Caballeros, Teruel, Sos del Rey Católico, Tarazona, por citar algunas localidades y por supuesto Zaragoza con clientes como la Caja de Ahorros y Monte de Piedad (actual Ibercaja), Gobierno de Aragón, Diputación Provincial, o el Ayuntamiento. Administración del Estado, así como diversas instituciones y particulares.

A Francisco Pérez Blasco le siguió en la misma línea F. Javier Pérez Latorre, trabajando siempre con el mismo afán de superación, y gestionando como sus antecesores, los diversos avatares de la vida económica con paciencia y perseverancia con la ayuda de un inestimable equipo humano liderado por Aurora Langa en Administración y Santiago Pascual en Obra.

A día de hoy, la cuarta generación, hace gala de la misma solidez de principios en la continuidad de la actividad de la construcción, con fuerzas renovadas y afán de superación. Francho Pérez Navaz dirige el comienzo del siglo, cumplido ya el centenario desde que Francisco Pérez Abad, al que rendimos nuestro reconocimiento, comenzó una andadura que continuamos con dignidad, dedicación, perseverancia y superación ahora con la esmerada dedicación de Eva Chueca en Administración y Nacho Ferrero en Obra.